Grandes cambios para esta tercera entrega: cambio
de reparto, cambio de director, cambio de estilo narrativo.
Si bien parte del film esta abordado de una forma
clásica, sosteniendo la historia sobre el ritmo lento, armonioso, pausado; con
la cámara moviéndose con rigurosa precisión y lentitud taxativa. Donde la
sugerencia y el "algo está pasando" pero no sucede nada, es un clima
muy bien creado, cargado de suspenso. Pero la cosa cambia tajante, un corte, un
cambio de ritmo casi salvaje, una cámara enfermiza que se desliza anárquica por
la escena que quiebra abruptamente la estructura clásica y purista (del género
de terror, se entiende) ganando ampliamente en frescura, en originalidad. Es
como si de repente Leigh Whannell (Director, productor, guionista) en un acceso
de rebeldía se liberará de todos los manuales del cine de terror y emprendiera
un camino a puro instinto. Como dijimos, la jugada sale bien, la película gana
en lo estético y sobre todo en la sorpresa, tanto en la sorpresa que el
espectador más conservador queda totalmente desconcertado y debe esforzarse por
retomar el hilo de la trama si es que ya no se le fue para siempre.
Una tercera parte de una historia de terror que
ya fue contada en cantidad de films anteriores generalmente no logra remontar
por más que carretee cientos de metros. Whannell lo intenta y lo logra usando
otra lógica, pero también tomando esas cientos de películas que contaron una
historia parecida haciéndole sutiles y no tan sutiles guiños, sobre todo a
"Poltergeist" el más famoso de esos films.
Esta no es una continuación lineal, es una
precuela. Como bien lo aclaro Whannell, no podían filmar una tercera historia
continuando los sucesos de la segunda parte, porque sería volver a repetir más
de lo mismo, por eso el giro a hechos anteriores a la primera parte dejan el camino
allanado para trabajar con más libertad.
Esta tercera entrega cuenta la historia de Elise
Rainer una psíquica que usará sus poderes para comunicarse con los muertos y
así tratar de frenar a unos espíritus malvados, que hostigan a una familia que
desesperadamente acude en su ayuda.
Se estrenó en enero
del 2015.
