Tenía que ser Disney
quien pusiera en la pantalla grande este cuento clásico de los hermanos Grimm y
Charles Perrault, interpretado por actores de carne y hueso.
La película una remake
del film de animación hecho por Walt Disney en 1950, casi la historia calcada a
no ser por algún aggiornamiento propio de nuestro siglo.
Llama la atención o no
tanto, que la dirección este a cargo de Kenneth
Branagh. No es su primer film de fantasía para el público infantojuvenil, ya
había dirigido en 2006 "La flauta mágica" con tan mala performance
que era de pensar que Branagh no volvería a encargarse de un proyecto de esta
naturaleza.
Un gran despliegue escenográfico,
magníficos vestuarios, la iluminación trabajada en pos de acentuar la
recreación de ese mundo y la sobresaliente actuación de Cate Blanchett como la
malvada madrastra son los puntos altos del film. Lo peor de la película es que
por momentos pareciera que estamos presenciando una obra de teatro hecha por
adolescentes.
Para los que no han crecido en el
planeta tierra, única forma en que se puede no conocer la historia, el film
cuenta las desventuras de una joven apodada por sus hermanastras (Holliday
Grainger y Sophie McShera) como la Cenicienta (Lily James) por tener siempre la
cara tiznada de su trabajo de sirvienta esclavizada en su propio hogar.
Es que la madre (Hayley Atwell) de la Cenicienta
ha muerto y su padre (Ben Chaplin) un hombre bueno e inocente vuelve a casarse
con la malvadísima Lady Tremaine (Cate Blanchett) para luego repentinamente
morir y dejar a la pobre Cenicienta a merced de estas tres arpías.
Pero Cenicienta siguiendo el consejo
que le diera su madre: "ser valiente y amable" no dejará que su vida
se vuelva triste.
Así llega un día en que hay baile en el
castillo y ella se prepara para ir, pero se lo impiden las malvadas.
Por suerte en ese mundo existen hadas
buenas, y una de ellas con un zapallo y unos ratones prepara una carroza que la
conduce al baile vestida a tono.
El príncipe (Richard Madden) la invita
a bailar, ella escapa antes que el hechizo caduque, y pierde un zapato... con
esta pista el príncipe, la buscará por toda la comarca.