De un pequeño
cortometraje muy bien realizado por el francés Patrick Jean en el 2010 también
llamado Pixels surge la ampliación o adaptación a largometraje de esta historia
fantástica, una vuelta de tuerca a la ciencia ficción.
Una invasión
supuestamente extraterrestre está destruyendo el mundo, su ejército está
conformado por personajes, máquinas y objetos de antiguos videojuegos de 8
bits; y tenemos toda una lista para nostálgicos que incluye juegos como el
Galaga, Donkey Kong, Space Invaders, Asteroids, Breakout, Frogger, Pac-man,
Tetris, Arkanoid y varios más de los que entretuvieron un par de generaciones y
aun hoy en menor medida lo hacen.
Es de esperar que
este film vuelva a catapultar estos juegos a una nueva camada de niños y jóvenes
que desconocen su existencia o simplemente les pasa inadvertido como una
antigüedad sin utilidad.
¿Cómo se hace para
luchar con semejante invasión? fácil, se busca a los mejores jugadores de videojuegos
de esa época y se los pone delante de una consola.
Claro que estos
intrépidos, o no tanto, gamers ya están un poco desgastados; con unas cuantas
arrugas y lesiones en dedos y muñecas por tantas horas moviendo palancas y
apretando botones. Pero ellos representan algo que las altas esferas del poder
no pueden creer: Son la única esperanza de salvación que tiene este mundo.
Adam Sandler además
de ser el protagonista del film es el productor, se encontró con el
cortometraje y le gusto tanto la idea que le compro los derechos a Patrick Jean
y contrato a Tim Herlihy para que escribiera un guion adaptando esta idea. Así
nace esta película que llegará a los cines en julio del 2015 en España tiene
fecha de estreno para el día 24 de ese mes, en Estados Unidos se podrá ver
desde el mes de mayo.
Además de la
actuación de Adam Sandler un elenco de conocidas estrellas encabezan el
reparto; Peter Dinklage, Josh Gad, Michelle Monaghan, Sean Bean y Kevin James.
La dirección es de
Chris Columbus.
Si bien esta comedia
de ciencia ficción es para todos los públicos los nostálgicos de los años 80´
estarán de parabienes.
